Esta nueva vacuna ya ha sido probada en ratones y monos lo que hace que sea más viable, también, en los humanos en un futuro próximo. 

Los autores de este estudio confirman que esta nueva terapia podría convertirse en un tratamiento más potente que las actuales estatinas, fármacos que se suelen utilizar para tener bajo control el colesterol que presentan algunos efectos secundarios.

Esta nueva vacuna se dirige a una proteína llamada PCSK9, que regula el colesterol en la sangre y funciona estimulando al organismo para acabar con los receptores a los que el colesterol se agarra cuando trata de ser eliminado. De hecho, las personas que tienen una mutación de dicha proteína tienen más riesgo de enfermedades cardiacas.

La vacuna logra detener el funcionamiento de dicha proteína y, de este modo, reduce los niveles de colesterol en sangre.

Los investigadores la probaron primero en ratones, donde consiguió reducir el nivel de colesterol LDL, y tras este primer éxito la probaron en un pequeño número de macacos en combinación con estatinas, logrando una drástica disminución del colesterol.

PCSK9 regula el colesterol en la sangre y funciona estimulando al organismo para acabar con los receptores a los que el colesterol se agarra cuando trata de ser eliminado. 
De hecho, las personas que tienen una mutación de dicha proteína tienen más riesgo de enfermedades cardiacas.