El estudio, que publica la revista 'Cancer Discovery' explica que muchas metástasis cerebrales evolucionan de forma independiente y pueden desarrollar alteraciones genéticas comunes que no se detectan en las biopsias de tumor primario, una circunstancia que sucede en un 53% de los casos analizados.

Del estudio se desprende que muchas de estas mutaciones genéticas se asocian a la sensibilidad a determinadas proteínas: PI3K, AKT, mTOR, CDK y a los inhibidores de HER2 y EGFR.

El estudio identifica mutaciones genéticas que no se habían detectado hasta ahora, que son comunes en la mayoría de metástasis y las asocia con grupos de proteínas que podrían convertirse en dianas terapéuticas viables para nuevos tratamientos dirigidos.

El jefe del Servicio de Oncología Médica de Vall d'Hebron y director del VHIO, Josep Tabernero, ha sostenido que la información del estudio "abre la puerta a poder diseñar en el futuro tratamientos más personalizados para los pacientes con metástasis cerebrales, una situación clínica que actualmente tiene muy mal pronóstico y para la que no se dispone de tratamientos muy eficaces".