La Unidad de Oncología Molecular del Ciemat y del Ciber de Cáncer (Ciberonc) ha desarrollado una aproximación innovadora a la investigación sobre cáncer: la inducción del desarrollo de tumores de manera controlada para, posteriormente, identificar todos los genes mutados en estos tumores.

Para ello, se han utilizado una nueva tecnología: transposones, elementos genéticos móviles con capacidad mutagénica.

Así, los investigadores, con ayuda de la Universidad de Iowa, en Estados Unidos, han conseguido desarrollar un modelo de ratón en el que se ha introducido un transposón modificado de manera que 'salte' dentro del genoma de ciertas células epiteliales del organismo e inactive los genes donde cae. Estos animales desarrollaron tumores de mama. 

El análisis por secuenciación masiva de los tumores determinó que gran parte de ellos sufría inserciones del transposón en el gen Rasa1.

Después, todos estos datos han sido validados en seres humanos usando una triple aproximación: Por un lado, se compararon con la gran cantidad de datos generados por análisis genómico de tumores humanos y por otro, se determinó su relevancia analizando biopsias de pacientes con cáncer de mama. 

Finalmente, se comprobó en cultivos celulares que las correspondientes alteraciones genéticas incrementaban la malignidad.

La importancia de este estudio, cuyos resultados se han publicado en la revista Cancer Research y en el que participa, también, el Instituto de Investigación del Hospital 12 de Octubre y la Universidad de Santiago de Compostela, radica en que los tumores humanos con alteraciones en el gen Rasa1 resultan ser los de tipo basal o triple negativo, aquellos que no disponen de tratamiento específico. 

Este trabajo permite abrir una nueva vía para entender cómo se desarrollan el cáncer de mama, el tumor con más prevalencia en España y que más muertes causa en España, y diseñar una terapia específica.