Los investigadores han identificado mecanismos en el funcionamiento del colesterol que podrían explicar por qué los pacientes con VIH tienen hasta el doble de riesgo de sufrir un infarto.

Su investigación se centró en analizar la funcionalidad de las partículas de colesterol HDL, principales responsables de evitar la acumulación de colesterol en los vasos, y así vieron que los pacientes con VIH muestran una alteración de los mecanismos de reparación del daño vascular que podría explicar el desarrollo de la arteriosclerosis prematura que les caracteriza.

"El tratamiento antirretroviral, aunque normaliza los valores virales e inmunológicos, no restituye estos mecanismos", ha aclarado Gómez Garre, investigadora del equipoy responsable del Laboratorio de Biología Vascular del Instituto de Investigación Sanitaria San Carlos.

Los avances de estos expertos podrían estar cerca de dar con la clave que favorezca el tratamiento de la enfermedad cardiovascular en estos pacientes y una psoible vacuna en un futuro. 

"Actualmente, tenemos identificada una proteína viral que podría ser responsable de este aumento de enfermedad cardiovascular y creemos que podría ser una firme candidata a diana terapéutica", informa la investigadora.