Algunos tipos de cáncer evolucionan con el tiempo en patrones que se rigen por las mismas leyes naturales que impulsan procesos físicos y químicos tan diversos como el flujo de los ríos o el brillo de las estrellas, según han informado los autores de un estudio reciente.

Así, esta nueva investigación plantea la posibilidad de que los médicos puedan tomar decisiones clínicas sobre cómo cambiará el cáncer de un paciente individual y qué tratamientos se deben utilizar, mediante la aplicación de fórmulas matemáticas a biopsias tumorales. 

Científicos del Instituto de Investigación del Cáncer de Londres y la Universidad Queen Mary de Londres (QMUL, por sus siglas en inglés), en Reino Unido, utilizaron una gran cantidad de datos, generada a partir de más de 900 tumores de 14 tipos diferentes, para demostrar que muchos cánceres se desarrollan en patrones particulares que pueden predecirse.

Es el caso de algunos tipos de cáncer como los de colon, estómago y algunos tipos de cáncer de pulmón, siguieron de cerca un camino establecido por un modelo teórico que describe la acumulación y la proliferación de las mutaciones genéticas durante una sola expansión rápida. El modelo, creado por el equipo de investigación, predijo que en muchos tumores todos los genes del cáncer importantes ya están presentes al inicio del crecimiento del tumor y nuevas mutaciones en el interior son esencialmente 'pasajeras' sin ningún efecto adicional.

El equipo de científicos demostró que estas mutaciones pasajeras se acumularían a raíz de una llamada ley de distribución de potencia 1/f, un patrón que se encuentra en la naturaleza en una variedad de sistemas biológicos, físicos y químicos, incluyendo el flujo del río Nilo y la luminosidad de las estrellas e, incluso, que ayuda a regular el mercado financiero.

El modelo fue menos eficaz en la predicción de la trayectoria de algunos otros tipos de cáncer, como los tumores cerebrales y de páncreas, lo que sugiere que en estos casos la selección natural, impulsada por presiones sobre los recursos y el espacio, podría desempeñar un papel más importante en la propagación de mutaciones.

Pero en el futuro, el desarrollo de estos tipos de cáncer también podría predecirse utilizando modelos matemáticos más elaborados, según estos científicos. El siguiente paso en su investigación es determinar cómo pueden medirse nuevas características de predicción.