Los microbios del intestino (microbiota intestinal) se pueden considerar un órgano más, ya que cada persona tiene 10 veces más bacterias en su cuerpo que células propias. 

Por tanto, pueden ser trasplantados para tratar enfermedades que producen alteraciones o desequilibrios en las poblaciones de microorganismos intestinales.

Así,  el trasplante de microbiota fecal ha sido eficaz en el tratamiento de la infección por 'clostridium difficile'. 

Ahora, con esta nueva y prometedora técnica  conseguirá,  a través,  de un "sencillo" proceso de centrifugación en gradiente, separar los microbios de la materia fecal.

Este procedimiento, según ha informado el investigador del CSIC en el Instituto de Productos Lácteos de Asturias, Borja Sánchez, "no afecta" a la composición de poblaciones microbianas originales, ni a su viabilidad, ni distribución ni proporción.

"Este método representa una estrategia sencilla para obtener microbiotas intestinales representativas a partir de muestras fecales", ha explicado Sánchez, para comentar que hasta 110 de bacterias pueden ser obtenidas a partir de 2 gramos de heces con esta metodología.