Los autores sugieren que los investigadores tienen que prestar atención a la cantidad de hierro que figura en los tratamientos estándar, como pastillas e infusiones y los efectos que podrían tener en el cuerpo.

El hierro es fundamental para que nuestro organismo funcione como es debido y tiene un papel crucial en el transporte de oxígeno, bajos niveles pueden provocar anemia, lo que lleva al cansancio y el letargo. 

Millones de personas en Reino Unido toman pastillas de hierro, que están disponibles en la farmacia o por prescripción médica, con seis millones de recetas emitidas cada año para los suplementos de hierro sólo en Inglaterra y Gales. 

Ahora en este estudio, el equipo de investigadores empleó células endoteliales humanas, que recubren los vasos sanguíneos, y añadió una solución de hierro de 10 micromolares (una concentración similar a la observada en la sangre después de tomar la pastilla de hierro) o un placebo. 

Al analizar genes que se emplean dentro de las células y luego examinar las células con más detalle, se encontró que a los diez minutos, las células tratadas con la solución de hierro habían activado los sistemas de reparación del ADN y que todavía estaban activados seis horas más tarde. 

Con todos estos datos, los autores de este estudio explican que las células parecen más sensibles al hierro de lo que se creía.