Los tumores digestivos son los más frecuentes entre los países occidentales. En España, en el 2015, se contabilizaron 41.441 casos de cáncer de colon; 8.456 de estómago; 6.941 de páncreas, y 5.800 de hígado.

Por su parte, la mortalidad por tumores colorrectales en 2014 fue de 15.449 personas (segunda causa de muerte por cáncer); 5.522 fallecimientos por cáncer de estómago; 6.278 muertes por tumores de páncreas y 4.536 por cáncer de hígado.

La investigación resulta clave para el abordaje de este tipo de tumores, de ahí que el Grupo de Tumores Digestivos realice una importante labor investigadora en esta área, con resultados relevantes, tal y como se pondrá de manifiesto en el marco del Simposio Internacional del Grupo, una de las citas de referencia y de mayor relevancia en la especialidad.

El doctor Eduardo Díaz-Rubio, presidente honorífico del Grupo de TTD, señala la importancia de los biomarcadores en el cáncer colorrectal metastásico: "Los tumores presentan un comportamiento diferente según su perfil molecular, por lo que el tratamiento es distinto. Los biomarcadores más relevantes son RAS, RAF, MSI y HER2, si bien su número irá en aumento según se vaya disponiendo de más fármacos 'accionables', es decir, que tengan actividad frente a una determinada alteración molecular.

Por lo tanto, el análisis molecular se basa hoy por hoy en determinaciones de ciertos genes, pero seguro que en el futuro necesitaremos paneles de genes e incluso el estudio de todo el exoma".

Una herramienta clave para prevenir este tipo de tumores es la biopsia líquida que se puede detectar en sangre o a través de la saliva.