El pasado 9 de enero, Carla, un bebé de cinco meses que nació con una malformación cardíaca congénita diagnosticada en el embarazo, fue trasplantada de corazón y se encuentra ingresada en la UCI, donde evoluciona favorablemente.

Este tipo de intervenciones es posible porque los niños nacen sin anticuerpos frente al grupo sanguíneo y se mantienen en niveles bajos hasta los 12-15 meses de edad.

Con este procedimiento se podría aumentar en un 50 % el número de trasplantes de corazón en niños menores de un año y reducir, de esta forma, las listas de espera.

De hecho, las posibilidades de que un bebé reciba un corazón en España son del 60%, un porcentaje y, a partir de ahora, aumentarán hasta el 90 %, según ha explicado la directora de la Organización Mundial de Trasplantes (ONT), Beatriz Domínguez.