El fármaco contiene el aminoácido L-cisteína, que elimina el acetaldehído, un compuesto que desempeña un papel clave para los dependientes de la nicotina.

El equipo analizó a cerca de 2000 fumadores que fueron divididos en dos grupos al azar, unos tomaron la pastilla durante 6 meses y otros, placebo. Cada día tenían que completar una ficha y exponer cuántos cigarros fumaban al día y el tiempo que le dedicaban a cada uno. 753 personas siguieron el tratamiento y todas las pautas que establecían los investigadores, los 944 restantes lo hicieron durante la mayor parte del tiempo.

Finalmente y al terminar los 6 meses de tratamiento, 331 personas habían dejado de fumar, entre ellos, 181 tomaron la pastilla y 150 el placebo.

El fármaco aún no está listo para su comercialización ya que no han comparado su eficacia con otros tratamientos, y porque se han observado ciertas limitaciones.