Un subida de temperaturas de 4 a 5 grados supondría poner en peligro todas las huertas de Valencia y Murcia, ya que muchos árboles no podrán resistir el calor del verano, así como la viticultura en el Duero, La Mancha o Navarra.

Las proyecciones señalan que el cambio climático sin adaptación supondrá un impacto negativo en los principales cultivos de España, como son el trigo, el arroz y el maíz.