Se trata de un importante estudio en el que han colaborado 128 científicos y que ha revisado los principales peligros que tienen que hacer frente los vegetales a nivel global. Algunos de estos peligros son: el cambio climático y la propagación de plagas.

Entre las especies descubiertas, se han identificado cinco nuevos tipos de plantas relacionadas con la yuca, lo que podría ayudar a desarrollar nuevas variedades de uno de los cultivos más importantes en los trópicos.

Los expertos explican que las plantas que mejor pueden resistir al calentamiento global son aquellas con hojas y corteza más gruesas, con estrategias hídricas más eficientes, raíces más profundas y una densidad de madera más alta.

Las raíces más profundas aguantan mejor la sequía y las hojas más gruesas y las hierbas más altas toleran mejor las altas temperaturas, subraya el estudio, mientras que los árboles de baja altura obtienen mejores resultados ante las sequías, incendios, aumento de temperatura y mayor concentración de dióxido de carbono (CO2).

Otro peligro para las plantas en el futuro será la propagación de plagas invasoras y patógenos por todo el planeta, impulsadas por el comercio y los viajes debido a la globalización, y prácticas especialmente peligrosas como el comercio de plantas vivas.

En el entorno de la medicina, se han descubierto en el sudeste asiático y América Latina nueve especies nuevas del género de enredaderas trepadoras Mucuna, que se usa para tratar la enfermedad de Parkinson.