Debido a la bajada de las temperaturas y a las primeras lluvias, este año se ha adelantado en algunas regiones la temporada de la berrea, uno de los mayores espectáculos de la naturaleza que tiene lugar en España. La duración habitual de este evento es desde mediados de septiembre hasta mediados de octubre. 

Después de un año de ronda solitaria, los ciervos frotan sus astas contra los troncos de los árboles, marcan su territorio y emiten los sonidos guturales que dan nombre al celo de los venados para avisar de su presencia al resto de competidores. Comienza el ritual en el que son ellos los que se tienen que preparar y "poner guapos".

Entre mediados y últimos de septiembre, los ciervos machos adultos se encuentran en su máximo esplendor y lucen sus cuernos altivos y orgullosos, a sabiendas de que las hembras se hallan preparadas para concebir. Todo el territorio nota el momento: las cortezas de los árboles no están, porque los ciervos han frotado sus cornamentas contra ellos para quitarse el terciopelo que las recubre; la tierra está levantada, porque los ciervos han orinado para marcarla; el resto de los animales están avisados, porque los ciervos berrean continuamente al poder y la hembra y ahuyentan a los machos.

Tras varios días de luchas agotadoras, los machos ganadores cubren a las hembras. Después de ocho meses de gestación, darán a luz, en el mes de mayo, a una sóla cría denominada jabato o cervatillo.

El ritual de cortejo acaba con las espectaculares batallas (no sangrientas) en las que los machos chocan sus grandes cornamentas para asegurarse su harén. Todos desean demostrar su valía y esplendor.

DÓNDE VER LA BERREA EN NUESTRO PAÍS
Alguno de los parajes donde se puede contemplar este espectáculo en nuestro país son la montaña central asturiana, en el concejo de Aller, donde los hosteleros de la zona vuelven a ofrecer este otoño visitas guiadas para presenciar la berrea. 

El Parque Nacional de Cabañeros y el Parque Nacional de Monfragüe son otras dos zonas donde se puede ver en directo la berrea. La Reserva Nacional de Caza de Boumort es el mejor espacio natural catalán para presenciar la berrea, pues la reserva alberga una de las mayores población de ciervo de Cataluña.