La tortuga tailandesa Omsin, a la que extrajeron cinco kilos de monedas del estómago, ha muerto en un centro veterinario de Bangkok por un problema intestinal provocado tras la intervención. 

Los veterinarios de la Universidad de Chulalongkorn le extrajeron a Osmin un total de 915 monedas tailandesas y extranjeras que los turistas habrían tirado al estanque donde habitaba como un ritual para ahuyentar la mala suerte.

Tras una primera intervención en la que le extrajeron las monedas, tuvo que ser operada de nuevo debido a que los intestinos del reptil se habían enredado entre ellos en la cavidad dejada por las monedas.

Aunque los veterinarios confiaban en su recuperación, la tortuga no ha podido regresar al centro de rehabilitación de tortugas de la Marina tailandesa en Sattahip, y finalmente ha fallecido por la acumulación de gas provocada por la obstrucción intestinal, lo que le ha causado deshidratación y septicemia.