Los animales pueden servir como terapia, apoyo asistencial o afectivo para algunas personas enfermas, mayores o para niños con trastornos en aprendizaje.

Esto lo saben bien en la Comunidad de Madrid donde se va a llevar a cabo un proyecto mediante el cual introducirán perros en algunas residencias de mayores, hospitales y centros educativos de la región.

El Servicio de Intervención Canina ya ha comenzado en la Residencia de Mayores Vista Alegre, para que los amigos de cuatro patas ayuden a estas personas a sustituir sus tratamientos o terapias convencionales por su afecto.

La presidenta de la comunidad, Cristina Cifuentes ha señalado esta iniciativa como "pionera" y ha asegurado que quieren avanzar "en dos sentidos: la mejora de los servicios públicos y la protección de animales".

En este año, se realizará la fase "piloto" que llevará los perros a tres residencias de mayores para "evitar el deterioro físico y cognitivo de los residentes".

Poco a poco se irá extendiendo a otros centros como hospitales y colegios. En las escuelas pueden ser muy favorable para para alumnos con necesidades educativas especiales como Trastorno de Déficit de Atención (TDHA).

Pero no solo esto, sino que se están investigando los beneficios de estos animales en menores que se encuentran en un proceso judicial y su influencia para tranquilizarlos y favorecer los testimonios más fluidos y detallados.

Uno de los elementos de este programa es el reencuentro entre perros y sus dueños cuando estos están viviendo en residencias o ingresados en centros sanitarios de larga a distancia.

Para desarrollar esta iniciativa la Comunidad de Madrid contará con el apoyo de la Universidad Rey Juan Carlos y el Colegio de Veterinarios.