En Datong, China, una empresa de energía solar ha instalado una nueva planta que, a vista de pájaro, tiene forma de oso panda. Dicho invento forma busca acercar el proyecto a los más jóvenes para concienciarles sobre la necesidad de hacer un uso mayor de energías renovables.

Para llevar a cabo el diseño, se han utilizado paneles solares de dos colores que, vistos a gran altura, pueden formar diferentes dibujos con distintos tonos.

La idea comenzó a tejerse en la 'Cumbre de París', en 2015, y ya recibió elogios de cargos importantes. La idea fue adoptada por la firma 'China Merchants New Energy Group' y el 1 de septiembre de 2016 se firmó un plan con el 'Plan de las Naciones Unidas' para el desarrollo de plantas solares-panda, que comienza a ser realidad con la de Datong.

Son unos 52 millones de dólares los que ha costado, y tiene la capacidad para generar anualmente energía para 10.000 familias. De esta manera se va a ahorrar alrededor de 1,06 toneladas de carbón anuales.

La empresa quiere construir 100 plantas con forma de oso en otros países como Australia, Pakistán, Reino Unido, Alemania, Francia, Italia y España.