La V edición del Estudio Cinfasalud sobre la percepción y hábitos de salud de las familias españolas nos ha traído datos relevantes sobre la nutrición de los más peques.

Esta investigación está avalada por la Sociedad Española de Pediatría y consiste en un cuestionario online realizado a 3.000 mujeres y hombres con hijos e hijas de entre 6 y 12 años, en todo el territorio español.

El estudio desvela que uno de cada diez escolares padece problemas de obesidad, mientras que un 8% sufre sobrepeso. En el lado contrario está el 16,4% de los niños que se encuentran en riesgo de subnutrición.

Además, entre los hábitos nutricionales, encontramos que ocho de cada diez niños y niñas no desayuna de forma correcta, es decir, no toman al menos un lácteo, un cereal y una fruta a primera hora de la mañana. Un dato más alarmante advierte que el 60,7% de los niños toma comida rápida, al menos una vez por semana.

Estos problemas relacionados con el peso y los malos hábitos de alimentación en los más peques están cada vez más presentes en nuestra sociedad. Por ello, desde este estudio instan a los padres a ser un claro modelo de conducta.

Según los expertos del mismo, la relación de proximidad y afecto entre los miembros de la familia hace que el hogar sea el primer marco para fomentar la conciencia de alimentarse de una manera sana y aseguran que "predicar con el ejemplo en la primera pauta que los padres deben seguir en casa".

Además, el dossier incluye una serie de prácticas alimentarias para seguir en el hogar, entre las que destacan:

- Organizar los horarios para poder comer juntos, al menos una comida al día y tomarse el tiempo preciso en la mesa para reforzar lazos.

- Estimular el apetito de los niños y niñas con menús y sabores variados. Podéis incluso diseñar menús semanales juntos, para que los más peques se implique en el proceso.

- Pedirles que pongan o recojan la mesa puede servir para sentirse implicados en el proceso de preparación de la comida y ayudará a inculcarles hábitos saludables.

- Dejar que cocinen con vosotros para enseñarles técnicas culinarias sanas y que les apetecerá comer al ser creación suya

- Llevarlos hacer la compra y leer los etiquetados con ellos para valorar los nutrientes esenciales de cada alimento.

Con estos y otros muchos ejemplos, vuestros hijos aprenderán de vosotros una de las cosas más importantes: llevar una alimentación sana para crecer fuertes y evitar problemas mayores relacionados con el peso.