Esta enfermedad afecta cada vez más a las sociedades occidentales, por lo que es necesario prevenirla desde pequeños.

El 12 de noviembre se celebra, cada año,el Día Mundial de la lucha contra la Obesidad y los datos continúan siendo alarmantes. España tiene una de las tasas más altas de prevalencia de obesidad infantil: el 18,4% de los niños españoles padece esta enfermedad, según el Estudio Aladino 2013, y esto puede degenerar en otras enfermedades como la diabetes.

La principal causa de la obesidad en menores se debe al abandono de la dieta mediterránea, por ello, los expertos recomiendan retomarla puesto que incluyen los nutrientes que los peques necesitan para un correcto crecimiento.

También, es beneficioso que los niños tomen cinco comidas diarias, que contengan alimentos fijados en la pirámide alimentaria. Hay que evitar los alimentos que engordan, pero que no aportan nutrientes al niño, como las grasas saturadas.

Otro consejo: lleva a tus hijos a hacer la compra y pídeles que te ayuden a cocinar. Así, se implicaran en el proceso y adquirirán los hábitos para una dieta saludable. Tras esto, una comida en familia será muy favorable para ellos.

Pero además otros factores influyen en la prevención de la obesidad. Anima a tus hijos a hacer ejercicito físico diario y asegúrate de que duermen más de diez horas. ¡Todo esto les ayudara a crecer fuertes y sanos!