Es la comida principal del día, el menú del colegio debe aportar hasta el 35 % de las necesidades energéticas, pero la calidad de estos platos ha empeorado.

En el Congreso Comer en la escuela,  Eroski Consumer ha presentado las conclusiones de un estudio y los menús escolares suspenden el examen dietético. Uno de cada tres presentan carencias.  Se sigue abusando de los precocinados y  en el 30% no incluía verdura.  Nos metemos hasta la cocina y comprobamos que afortunadamente no todos son iguales.

Solemos pensar que los menús de catering son los peores pero no es así,  en esta cocina por ejemplo se elaboran miles de menús que se sirven también a otros centros. El catering sube puntos, 7 de cada 10 colegios optan por este servicio.

Pagar más por el menú no quiere decir que sea mejor,  de hecho entre los 20 menús más caros y 20 más baratos no han encontrado diferencias nutricionales. Han comprobado también que donde hay más calidad en comida hay menos suspensos.