Con las diez personas que han perdido la vida en las carreteras españolas durante el pasado fin de semana, se ha superado la cifra de fallecidos de todo 2016. A falta de trece días para acabar 2017, este año llevamos 1.165 víctimas mortales, frente a los 1.161 muertos contabilizados en todo el año pasado, según datos de accidentes en vías interurbanas recabados hasta 24 horas después de los siniestros.
Para el presidente de la Asociación de Víctimas de Accidentes DIA, Francisco Canes, estos datos son "dramáticos" y se pueden atribuir a los responsables del Ministerio del Interior y de la DGT por "reducir la inversión en carreteras y recortar la plantilla de la Guardia Civil de Tráfico".
Canes plantea aumentar el número de efectivos de la Guardia Civil, hacer plantes de seguridad vial adecuados y creíbles y "dejar de hacer campañas de 'marketing'".
"Lo que vemos son excusas y falta de previsión", reprocha Francisco Canes, para quien el aumento del tráfico "no es sorpresivo, lleva surgiendo desde hace unos años", por lo que pide a la administración "anticiparse y solucionar" este problema.
Desde la Asociación para el Estudio de la Lesión Medular Espinal (Aesleme), el dato conocido expone un "pequeño repunte" en los fallecidos en carreteras interurbanas que relaciona con los descensos registrados los últimos años, tras cifras de los años 90 en la que el número-. de fallecidos alcanzaba los 9.000.
Por su parte, Mar Cogollos, presidenta de Aesleme, ha precisado que se trata de una realidad "muy triste para todos" y de "una responsabilidad compartida" por las autoridades y los conductores, ya que éstos son los que se ponen al volante.
Por eso propone tomar medidas como más educación vial, junto con otras como proteger a los motoristas, a los conductores de furgonetas, sobre todo a los de repartos de compras por internet, y a lo ciclistas, fundamentalmente a los que reparten comida por las ciudades.
Sobre este asunto, la presidenta de la asociación Stop Accidentes, Ana Novella, también considera que son prioritarias "la concienciación y el respeto" para atajar la siniestralidad en carreteras, empezando por las aulas, con asignaturas "obligatorias y transversales" para que los más jóvenes "crezcan en el respeto al Tráfico".
Asimismo, Novella lamenta la falta de revisión de las carreteras secundarias, cuyas condiciones varían "dependiendo de si las controla el Estado o alguna comunidad autónoma", y pide modificar el Código Penal para que se endurezcan las penas para quienes causan muertes por infracciones de tráfico.