Los usuarios podrán obtener una grabación completa de todo lo que sucede en el trayecto, dentro y fuera de su vehículo. La idea es que consigan pruebas gráficas más evidentes que servirán para deducir responsabilidades y evaluar la forma de conducción ante un posible accidente.

También conocidas como Car Ángel cuentan con GPS integrado, acelerómetro, sistema compatible con Google Maps y dos cámaras digitales de video, que acercan a los automóviles una de tecnologías punteras, la aeronáutica. Sus posibilidades y su diseño han hecho que el dispositivo reciba la denominación de caja negra para vehículos.

La compañía creadora, Naical, pretende revolucionar los sistemas de seguridad y prevención para vehículos. El dispositivo, pensado para particulares, empresas con flotas o taxistas, pretende servir de sistema de control de todo lo que suceda en el vehículo.

Su caja negra se “puede ahorrar tiempo y dinero”, principalmente por el volumen de datos que genera en relación a su instalación. Se instala de manera sencilla en el parabrisas, sin necesidad de manipular los sistemas internos del motor y sin presentar cualquier otra complicación en su uso y configuración.

La grabación de imágenes se activa de forma manual o automáticamente con la ayuda de su sistema inteligente. El acelerómetro, además, reacciona al detectar un movimiento brusco o una alteración inesperada en la velocidad de su vehículo, registrando todos los datos segundos antes y segundos después para almacenar ese intervalo.

Para tener acceso las imágenes almacenadas, los usuarios deben disponer de un ordenador. El contenido puede ser transferido a través de un cable USB o vía Wi-Fi, sin tener que desinstalar el dispositivo del coche y sin bajarse del mismo.

A los videos y datos se accede mediante claves de seguridad que su propietario posee, manteniéndose la información como privada. Para mayor seguridad, los videos quedarán memorizados de forma simultánea en la memoria interna del aparato y en una tarjeta memoria SD.