La Comisión ha afirmado que "no existe ninunga norma en la Unión Europea que regule las características de los ralentizadores y corresponde a las autoridades competentes de los Estados miembros definir los requisitos que deben cumplir", en lo que se refiere a la seguridad de los usuarios de la red viaria, y tratar de alcanzar un "equilibrio entre los beneficios que aportan desde el punto de vista de la seguridad y los posibles inconvenientes resultado de su uso por parte de los servicios de emergencia".
Mateo Lafragua, trasplantado de riñon, comenzó su petición tras tener que pasar a diario por una carretera con diecinueve resaltos en siete kilómetros es el camino que separa Artziniega (Álava) de Bilbao, donde se encuentra el Hospital al que muchos enfermos tienen que desplazarse cada día. Mateo Lafragua, un hombre trasplantado dos veces de riñón, conoce por experiencia propia el calvario al que los enfermos tienen que enfrentarse. Por eso, decidió realizar un informe sobre los resaltos y su impacto negativo en el traslado de pacientes y hacer visible este problema.
Lafragua ya ha conseguido que los presupuestos del Gobierno Vasco para 2018 cuenten con una partida de 100.000 euros para eliminar los 19 resaltos colocados a lo largo de un tramo de siete kilómetros que separa Artziniega de Bilbao, donde se encuentra el hospital de referencia.
Su lucha está respaldada por distintos estudios especializados que habían advertido que los frenazos, acelerones o movimientos bruscos, provocados por los resaltos, causaban un aumento considerable de tiempo en el traslado de los pacientes hasta el hospital.
Asimismo, Lafragua ha participado en la elaboración del informe 'La repercusión de los resaltos en el transporte sanitario de emergencias', presentado en el Parlamento y admitido a trámite con el que pidió que se realizara un estudio de todos los resaltos de la Comunidad Autónoma.
Por otra parte, Lafragua ha impulsado la grabación de un documental que, en siete minutos, narra lo que sucede dentro de una ambulancia de emergencias al pasar por una carretera con resaltos. Lafragua quiere llevar este debate al Parlamento Europeo.