La Dirección General de Tráfico se ha reunido con los alcaldes de los principales ayuntamientos españoles para colaborar y mejorar la seguridad en las vías urbanas. El pasado año el 57% de los accidentes con víctimas se produjeron en ciudades. Es dónde menos se ha reducido la siniestralidad, especialmente en municipios de más de 100 habitantes.

De los 1.900 fallecidos el pasado año en todo el país 461 murieron en zona urbana. En las ciudades, por ejemplo, los conductores se confían más y utilizan menos el cinturón, el casco y las sillitas infantiles.

Entre las novedades de la reforma de la Ley de Tráfico se va autorizar a las policías locales a imponer multas sin necesidad de parar el vehículo. También podrán sancionar los agentes de movilidad.

LA DGT ha pedido a los ayuntamientos que agilicen y mejoren la información  e los accidentes ocurridos en sus calles. El objetivo: si se conocen las causas se pueden mejorar en el futuro.