Hemos conocido dos casos que sirven de ejemplo a seguir para que España deje de estar a a la cola de Europa en cardioprotección, os los contamos.

Los padres y alumnos de este colegio de Madrid venden las pulseras 'salva vidas' a tres euros para canjear ese dinero por un desfibrilador para el centro. 
La idea surgió de la asociación de padres y madres, pero el colegio no disponía de fondos para financiar el aparato. Por eso decidieron apelar a la solidaridad ciudadana.

"Pero tan importante como tener un desfibrilador en el centro es saber utilizarlo. En esta clase enseñan a los alumnos a actuar en caso de emergencia", nos cuenta la directora del centro.

En una comunidad de vecinos, conscientes de la importancia de tener un desfibrilador, han instalado uno.

El aparato se encuentra en la portería y está disponible las 24 horas del día y, tanto los conserjes como los vecinos, han sido formados para perder el miedo a usarlo.

Y es que, si al lado de cada extintor hubiera un desfibrilador, se podrían salvar más de 4.500 vidas al año

Estos son sólo dos ejemplos, pero hay más.  Si quieres que tu comunidad obligue a instalar desfibriladores en espacios de uso público, firma nuestra petición en la web de constantes y vitales.