Un importante avance que ha sido posible gracias al estudio de informáticos de la Universidad de Stanford, California, en Estados Unidos. 

Para conseguirlo, los informáticos han creado una base de datos de 13.000 imágenes de la enfermedad de la piel y entrenaron su algoritmo para diagnosticar, a siemple vista, un posible cáncer, un objetivo conseguido a la primera. 

"Nos dimos cuenta de que era factible, no sólo hacer algo bien, sino igual que un dermatólogo humano", resalta uno de los creadores, Sebastian Thrun, profesor adjunto del Laboratorio de Inteligencia Artificial de Stanford. 

"Fue entonces cuando nuestro pensamiento cambió, fue cuando dijimos: 'Mira, esto no es sólo un proyecto de clase de estudiantes; es una oportunidad para hacer algo grande para la humanidad'", relata uno de los informáticos.

Generalmente, el diagnóstico del cáncer de piel comienza con un exámen visual. La lesión sospechosa se analiza con la ayuda de un dermatoscopio. 

Cada año hay alrededor de 5,4 millones de nuevos casos de cáncer de piel en Estados Unidos y, aunque la tasa de supervivencia a cinco años para el melanoma detectado en sus primeros estados es de alrededor del 97%, cae a aproximadamente 14% si se detecta en sus últimas etapa.

La prevención tempran, de esta enfermedad,  podría tener un enorme impacto en los resultados del cáncer de piel.