Un nuevo estudio se centra en la nueva plataforma de intervención llamada Functi_ON que tiene como principal novedad el empleo de estrategias que ya han demostrado ser eficaces.

Igor Bombín, neuropsicólogo de la Fundación Reintegra y coordinador del proyecto, "es importante no dejarse llevar por la apariencia sofisticada que pueden ofrecer las nuevas tecnologías, y poner el foco en cómo se trabajan los diferentes procesos cognitivos.

La evidencia científica nos señala las estrategias más eficaces para rehabilitar los procesos cognitivos". El investigador también insiste en que la herramienta diseñada ha de estar en todo caso gestionada por un profesional experto en rehabilitación neuropsicológica, "la plataforma Functi_ON no sustituye la labor del clínico, sino que la aumenta: es una herramienta útil en manos de un experto, pero que sirve de poco empleada sin criterio o simplemente de forma lúdica".

El diseño de los diferentes elementos que configuran la herramienta es el resultado de una extensa revisión de la literatura científica, con más de 500 artículos científicos publicados en revistas internacionales revisados, de los que se ha extraído una selección de las estrategias de rehabilitación neuropsicológica que la evidencia científica avala como más eficaces.

La herramienta de intervención, denominada Functi_ON, consta de tres elementos principales. En primer lugar, una serie de ejercicios con aspecto lúdico, destinados a entrenar y mejorar los principales procesos cognitivos: memoria, atención, funciones ejecutivas, lenguaje, velocidad de procesamiento, cálculo y memoria de trabajo.

En segundo lugar, existe un módulo de psicoeducación, mediante el que los pacientes y sus familiares aprenden cómo se estructuran nuestros procesos cognitivos, qué pasa cuando se alteran y sus consecuencias, con especial énfasis en cómo se pueden compensar estas alteraciones.

Finalmente, el programa cuenta con una aplicación móvil para compensar los problemas de memoria (amnesia) y de gestión de la conducta que, mediante la interacción con el paciente, su familiar y el clínico, asiste al paciente para que pueda llevar a cabo un mayor número de actividades cotidianas con autonomía, mientras que sus familiares/cuidadores le pueden supervisar a distancia.