El estudio, publicado en PLOS Computational Biology, ha sido realizado por investigadores del Centro de Regulación Genómica (CRG), de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona (UPF), y del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM), en colaboración con científicos de varias instituciones suizas.

La parte codificante del genoma humano (exoma) tiene la información para que se formen proteínas, células, órganos, etc, pero es también donde tienen lugar la mayoría de las mutaciones que causan enfermedades.

La técnica de edición genética utilizada en todo el mundo, la CRISPR-Cas 9, está inspirada en los mecanismos de defensa de las bacterias y se utiliza para hacer “cortapega” del genoma que codifica proteínas (exoma), lo que limita mucho la investigación.

Así, los investigadores han creado esta nueva técnica que es un software que permite diseñar parejas de sgRNA guías, lo que permitirá "hacer un doble corte en el genoma y eliminar una parte de un gen", explica la coautora del estudio Carme Arnan, del CRG.

La gran ventaja de la nueva herramienta es que permite trabajar con varios genes en paralelo, algo esencial en la investigación de procesos porque "permite estudiar qué genes son importantes y cuáles no lo son", explican los investigadores.

Por tanto, la herramienta permitirá hacer experimentos a gran escala y tendrá grandes aplicaciones, no sólo en el ámbito de la biomedicina para modificar células y organismos, sino también para buscar nuevos tratamientos.