Se trata de un hallazgo que ha sido publicado en la revista digital 'Proceeedings of The Natonal Academy od Sciences'. 

"La proteína que hemos identificado, G3BP2, afecta a la supervivencia y el potencial proliferativo de las células de cáncer de mama mediante la regulación de la proporción de TIC y no TIC dentro de un tumor", explica el director del estudio, Igor Garkavtsev, de los Laboratorios Steele de Biología Tumoral en el Departamento de Oncología de Radiación del MGH. 

El cáncer de mama se componen de muchos tipos de células diferentes, y se cree que las TIC, aunque constituyen una proporción muy pequeña de los tumores, son capaces de generar toda la gama de células cancerosas. 

Las TIC pueden estar presentes en la mayoría de los tipos de cáncer y como parecen resistir las terapias comunes, encontrar maneras de dirigirse directamente a las TIC, lo que requiere una mejor comprensión de los mecanismos por los que se generan y mantienen, podría mejor ar el tratamiento de este anfermedad.

El equipo de MGH comenzó tratando una línea celular de cáncer de mama metastásico, que se espera que contenga una proporción significativa de TICs, con combinaciones del fármaco de quimioterapia paclitaxel y compuestos de una biblioteca de más de 60.000 pequeñas moléculas diversas. 

Un análisis más detallado reveló que G3BP2 regula la iniciación del tumor de mama mediante el control de los niveles de TIC dentro de los tumores. La proteína ejerce sus efectos mediante la estabilización del mRNA de SART3, una proteína que desempeña un papel en la pluripotencia, la capacidad de dar lugar a cualquier tipo de célula, de las células madre embrionarias, lo que conduce a una mayor expresión de los factores de pluripotencia Oct-4 y Nanog.