Se trata de la proteína, interleucina-37 (IL-37), una citocina que pertenece a la familia de la interleucina-1, y que ha demostrado que por primera vez suprime la respuesta inflamatoria después de una lesión medular "y minimiza la degeneración del tejido medular y las discapacidades funcionales", según ha informado este miércoles la UAB en un comunicado.

Este descubrimiento supone "una nueva estrategia terapéutica para el tratamiento de lesiones medulares agudas" y que actualmente no tienen tratamiento efectivo de uso clínico.

Este hallazgo abre las puertas al tratamiento de enfermedades neurodegenativas puesto que la respuesta inflamatoria, que se produce, tiene un papel fundamental en el transcurso de estas patologías.

El equipo del doctor López utilizó un  ratón modificado genéticamente que produce la forma humana de la IL-37 que les ha permitido examinar la función de la misma y ha mostrado que si se administra inmediatamente después de la lesión "recuperan cierto grado de movilidad".