Los científicos comparon las células cancerosas con atletas de élite que "dependen de dietas especiales para actuar", y aseguraron que al igual que estos, el metabolismo de las células tumorales también puede que dependan de nutrientes específicos para vivir.

La investigación se centró en identificar qué nutrientes requieren las células cancerosas para desarrollarse, con el fin de crear nuevos tratamientos contra el cáncer basados en bloquear el acceso de las células a los nutrientes que necesitan para hacerlos "morir de hambre".

Los investigadores descubrieron que las células de una forma muy agresiva y resistente al tratamiento de cáncer de mama, llamado cáncer de mama triple negativo (TNBC), mueren rápidamente cuando se les priva de un nutriente clave llamado cistina.

Al examinar las causas, encontraron que esta dependencia de la cistina, que es un aminoácido, se debe a un mecanismo que muchos tipos de células tumorales utilizan para migrar a nuevas ubicaciones en el cuerpo. El cáncer de mama triple negativo constituyen cerca del 10 al 20% de todos los casos de cáncer de mama, y los pacientes que lo padecen tienen pocas opciones de tratamiento fuera de la cirugía y la quimioterapia.

Los investigadores descubrieron que las células de una forma muy agresiva y resistente al tratamiento de cáncer de mama, llamado cáncer de mama triple negativo (TNBC), mueren  rápidamente cuando se les priva de un nutriente clave llamado cistina. Al examinar las causas, encontraron que esta dependencia de la cistina, que es un aminoácido, se debe a un mecanismo que muchos tipos de células tumorales utilizan para migrar a nuevas ubicaciones en el cuerpo.

"Este proceso es bien conocido y aparece en las células de cáncer metastásico, y lo que hallamos es que también hace que las células sean adictas a la cistina", aseguró en el artículo su autor principal, Jen-Tsan Ashley Chi, profesor de genética molecular y microbiología de la Escuela de Medicina de la Universidad de Duke.