El nuevo enfoque, que consistía en combinar dos tratamientos contra el cáncer, duplicó el tiempo de supervivencia media de siete meses a dieciocho, sin aumentos de la dosis de quimioterapia, sin toxicidad añadida y sin efectos secuendarios adicionales. Todo un éxito de los investigadores del Hospital Universitario de Haukeland, Noruega.

Este nuevo tratamiento resultó de la combinación de la técnica de laboratorio "sonoporación" con el compuesto de quimioterapia responsable de aumentar la porosidad de las células pancreáticas para llevar el fármaco a las células cancerosas necesarias.

"Cuando comparamos la cantidad de tratamiento que nuestros pacientes eran capaces de aguantar, vimos un aumento significativo de los ciclos de tratamiento", destaca Spiros Kotopoulis, investigador del Centro Nacional de Ultrasonido en Gastroenterología en el Hospital Universitario de Haukeland, también en Noruega.

Antes de que la ténica esté disponile para los pacientes con este tipo de cáncer, debe ser sometida a más pruebas en ensayos clínicos con más pacientes, algo que puede durar años. Sin embargo, son resultados prometedores para una enfermedad que suele tener mal pronóstico.

El efecto de la combinación de las dos técnicas permite penetrar más profundamente en el tejido orgánico, produciendo un efecto más fuerte. Esta terapia estabilizó en algunos casos, en otros disminuyó, los volúmenes de los tumores de la mitad de los pacientes y aumentó el tiempo de supervivencia de siete a dieciocho meses.