El análisis de las células sanguíneas vivas de pacientes con enfermedades mentales podría suponer el descubrimiento de nuevas terapias para tratar estas enfermedades, así como acelerar en gran manera la creación de nuevos fármacos mucho más eficaces y seguros.

A través de una nueva investigación se ha descubierto la posibilidad de desarrollar nuevos medicamentos y de avanzar en terapia psiquiátrica; algo que hasta el momento se basaba en descubrimientos fortuitos, debido, entre otras cosas, a la imposibilidad de obtener muestras de tejido cerebral, y de la necesidad de contar con terapias mucho más personalizadas.

El estudio de las células sanguíneas de 42 personas con esquizofrenia ha demostrado la capacidad de analizar receptores y moléculas relacionados con alteraciones mentales y con diversas enfermedades de esta clase, y que pueden encontrarse también en el sistema nervioso.

Esto supone la identificación de dianas terapéuticas, que posibilitan el uso de medicamentos ya existentes para probar su efectividad para convertirse en tratamientos de distintas enfermedades mentales. Además, los resultados de este estudio garantizan la posibilidad de investigar y descubrir terapias personalizadas y enfocadas de forma individual en cada paciente.