Algunos posibles síntomas de que pueden indicar que podemos tener un posible cáncer de colón y que por tanto, debemos acudir al médico es el sangrado persistente en el ano, un cambio en el ritmo de deposiciones (tanto diarrea como estreñimiento), anemia, pérdida de peso y sensación de no haber evacuado completamente nuestras necesidades básicas.

También los médicos recomiendan que todas las personas mayores de 50 años deberían hacerse, al menos, una prueba de diagnóstico, tal como explica el doctor Óscar Alonso. 

La detección de sangre oculta en las heces y la colonoscopia son las dos principales pruebas que se realizan para detectar el cáncer de colon. 

Alonso ha explicado que la colonoscopia es más "resolutiva", ya que "trata de detectar lesiones precoces, que se llaman pólipos, y que en unos años pueden acabar desarrollando un cáncer de colon, y permite también quitarlos".

Tras el diagnóstico, existen varios tratamientos disponibles que dependen de la fase en la que se encuentre la enfermedad. 

En una etapa temprana, se puede extraer el tumor con una colonoscopia, mientras que en lo que se conoce como cáncer infiltrante se requiere cirugía. Ante la metástasis, hay que recurrir a un tratamiento multidisciplinar que incluya cirugía, radioterapia o quimioterapia.

La Asociación Española contra el Cáncer explica que si se detecta el cáncer de colon en una fase precoz, la supervivencia a los 5 años se sitúa por encima del 90% de los casos, mientras que en un estado avanzado se sitúa en menos del 8%.