En este gran avance ha tenido especial relevancia el marcador de la proteína del antígeno prostático específico (PSA), cuyo análisis permite diagnosticar enfermedades relacionadas con la próstata con anticipación incluso a la manifestación de los síntomas.

"Una de las mayores innovaciones ha sido la prostatectomía radical, vía laparoscópica y robótica, que aporta mejoras en la continencia urinaria y la potencia sexual", ha explicado la jefa de Urología de la Fundación Jiménez Díaz y coordinadora del encuentro, Carmen González Enguita.

La incorporación de nuevos fármacos y moléculas ha conseguido mejorar de manera notable la calidad de vida y la supervivencia de pacientes en los estados más avanzados de la enfermedad.  

Tanto en la detencción como en el seguimiento del cáncer de próstata, las técnicas de imagen se configuran como "las herramientas clave de un futuro orientado hacia la biopsia de fusión.

Ésta combina la información aportada por la ecografía, cada vez más precisa, y la resonancia multiparamétrica, que ofrece información morfológica y funcional de la próstata", ha añadido la experta.

Por otro lado, Carmen González ha recordado que en las consultas de uro-oncología, el cáncer de próstata es el más frecuente y ha subrayado la importancia de que en el tratamiento participen también otros especialistas.