Una de las grandes preguntas pendientes en el campo de la oncología es por qué los tumores pueden dividirse indefinidamente y cómo son capaces de diseminarse por el organismo.

Marisol Soengas, jefa del Grupo de Melanoma del CNIO, coordinadora de ASEICA-Mujer, además de pertenecer a la junta directiva de la Asociación Española de Investigación sobre el Cáncer, ha recibido una de las ayudas más competitivas del Consejo Europeo de Investigación, las ERC Advanced Grant, para para el desarrollo de un proyecto que incida en la visualización y bloqueo de las metástasis del melanoma.

Uno de los grandes retos en investigación del melanoma es entender cómo unas lesiones de poco más de 1 mm de grosor pueden dar lugar a células que se diseminan por todo el organismo. Unas partículas que causan más del 80% de los fallecimientos por cáncer de piel. El equipo de la investigadora ha descrito múltiples genes que definen la “seña de identidad del melanoma” que lo hace tan metastásico.

En este estudio el interés reside en intervenir durante fases más tempranas de la enfermedad, y una vez que las metástasis se generen, eliminarlas. A través del proyecto Metalert-Stop, que lidera Soengas, la investigación se centrará en entender cómo se originan las metástasis para tratarlas de forma más eficiente. Para ello, se usarán modelos animales muy sofisticados y se validarán los resultados en muestras de pacientes.

Soengas ya había conseguido ver en 2017 cómo el melanoma actúa en todo el organismo antes incluso de que aparezca la metástasis; por primera vez en organismos vivos sin recurrir a cirugía ni intervenciones invasivas. Este seguimiento del melanoma, por el que la investigadora recibía el Premio Constantes y Vitales a ‘Mejor Publicación Biomédica del Año’ se lograba gracias a unos modelos de ratón bioluminiscentes llamados MetAlert.

MetAlert se ilumina en las zonas donde se activa la generación de vasos linfáticos en el sistema circulatorio, y cuya generación es uno de los pasos esenciales para la diseminación de este tipo tumoral. Además, el estudio identificaba una proteína llamada MIDKINE que representa una posible diana terapéutica. “A través de estudios posteriores, hemos visto que MIDKINE no solo actúa en la generación de vasos linfáticos, sino que tiene otras funciones inesperadas; como, por ejemplo, contribuir a evitar que el sistema inmune reconozca y ataque a los tumores”, explicaba Soengas.

Metalert-Stop utilizará los ratones MetAlert y otros modelos que el grupo ha diseñado para determinar dónde y cuándo se pueden visualizar in vivo las primeras fases del proceso de diseminación. Además, estudiará los mecanismos implicados en esa activación de la metástasis, incluidos distintos factores de riesgo ambientales. Por último, los investigadores se plantean un tercer objetivo dirigido a la búsqueda de terapias: “Tenemos estos ratones que se iluminan cuando hay procesos de metástasis. La pregunta ahora es: ¿cómo los apagamos?”, resume Soengas. “Los resultados del trabajo se validarán en muestras humanas de pacientes que se encuentran en distintas fases de tratamiento”.

Se espera que los resultados del proyecto puedan ser muy útiles para comprender los procesos de metástasis en otros tipos tumorales, como gliomas y glioblastomas, carcinomas hepáticos o de pulmón. “Este potencial también ha sido muy importante para la concesión de la ayuda”, concluía la investigadora.

De esta manera, Soengas recibe 2,5 millones de euros, la cantidad máxima estipulada para estas ayudas, para desarrollar su proyecto durante los próximos cinco años. Este, ha sido seleccionado en un proceso de entre casi 1.900 propuestas de investigadores europeos.

Además de la Dra. Soengas, el Dr. Eduard Batlle del Institut de Reserca Biomédica de Barcelona recibía también otro de estos proyectos otorgados por el ERC. En su caso, el investigador estudiará mecanismos implicados en la enfermedad residual del cáncer colorrectal con el fin de combatir posteriormente la misma a nivel terapéutico.

Las ERC Advanced Grants se conceden a proyectos que tengan la capacidad de abrir líneas muy innovadoras y originales, y contribuir a la resolución de retos científicos pendientes, llevados a cabo por investigadores europeos líderes en sus respectivos campos que tengan una trayectoria novedosa, original y relevante en la que en los últimos 10 años hayan logrado importantes hallazgos científicos.