El melanoma es un tipo de cáncer de piel, poco frecuente, pero con un elevado índice de mortalidad, según datos del Instituto Catalán de Oncología (ICO).

Por este motivo, el ICO recomienda una serie de medidas para evitar estas quemaduras como empezar a tomar el sol de forma gradual y evitar la exposición en las horas de máxima intensidad, de 12 a 16 horas, usar crema solar de factor de protección superior a 20, beber agua con frecuencia y utilizar gorros y gafas de sol para minimizar su impacto.

Los expertos también piden tener en cuenta otras cuestiones como que el hecho de no sufrir calor o que el día esté nublado no evita la quemadura, que el uso de productos fotoprotectores no es sinónimo de barra libre para prolongar la exposición al sol, y que en la playa y en la montaña es más probable quemarse porque aumenta la intensidad social.

Por otro lado, los expertos también alertan de que la exposición prolongada frente al sol envejece y daña la piel con lo que aparecen arrugas prematuras, algp parecio a lo que sucede cuando se utilizan cabinas o lámparas solares.