La mortalidad por infarto agudo es mucho más alta en mujeres que en hombres. Un estudio desarrollado en nuestro país destaca que esta cifra puede suponer hasta el doble de muertes.

La investigación, desarrollada por la Sociedad Española de Cardiología en el Hospital Vall d'Hebron, ha concluido que el riesgo de mortalidad por un infarto de miocardio con elevación del segmento ST es de un 19% en mujeres, lo que doblaría la cifra del 8% en hombres.

Como reconocen los responsables del estudio, la única causa concreta que explique esta diferencia se encuentra en el tiempo que se tarda a la hora de acudir a un centro sanitario, después de desarrollar los síntomas típicos del infarto. “Las mujeres aguantan mucho el dolor y minimizan los síntomas”, declaraban los investigadores, “esta pérdida de tiempo supone que se les realice menos angioplastias.” Este procedimiento, utilizado para evitar secuelas tras el infarto y para tratar esta patología, consiste en dilatar la arteria o vena ocluida, con el fin de restaurar de nuevo el flujo sanguíneo.

Para este estudio se ha utilizado una muestra correspondiente a más de 320.000 pacientes, ingresados en nuestro país por infarto agudo de miocardio, entre 2005 y 2015. Y si bien se ha observado una importante reducción de la tasa de mortalidad en los centros que cuentan con un sistema de atención al infarto, la diferencia en la mortalidad entre hombres y mujeres continúa sin eliminarse.