El equipo de investigadores utilizó los datos del estudio ‘Carga global de enfermedades, lesiones y factores de riesgo’ (GBD, por sus siglas en inglés) y analizó cómo 34 factores de riesgo conductuales, metabólicos, ambientales y ocupacionales impactaron sobre la salud y la mortalidad provocada por 23 tipos de cáncer.

Estos tipos de cáncer son responsables de 4,45 millones de muertes en todo el mundo en 2019, el 44,4% de la cifra total.

Un alto índice de masa corporal, el tabaquismo y el consumo de alcohol figuran entre los principales factores de riesgo para ambos sexos, aunque afectan más a los hombres debido a factores ambientales, ocupacionales y de comportamiento, según destaca este trabajo.

Entre 2010 y 2019, las muertes por cáncer debidas a factores de riesgo aumentaron un 20,4% a nivel mundial, pasando de 3,7 millones a 4,45 millones.

Además, la mala salud debida al cáncer aumentó un 16,8 % en el mismo periodo, pasando de 89,9 millones a 105 millones de años de vida ajustados por discapacidad (AVAD).

Los riesgos metabólicos representaron el mayor aumento porcentual de las muertes por cáncer y la mala salud, con un aumento de las muertes del 34,7% (de 643.000 muertes en 2010 a 865.000 en 2019) y de los AVAD del 33,3% (de 14,6 millones en 2010 a 19,4 millones en 2019).

Los factores de riesgo conductuales (como el consumo de tabaco, el consumo de alcohol, las relaciones sexuales de riesgo y los riesgos dietéticos) fueron responsables de la gran mayoría de los cánceres a nivel mundial, representando 3,7 millones de muertes y 87,8 millones de AVAD en 2019.

Las cifras del estudio para hombres y mujeres

Casi 2,88 millones de muertes en hombres y 1,58 millones de muertes en mujeres se podrían atribuir a los 34 factores de riesgo estudiados.

Siendo los principales factores de riesgo globales de muerte por cáncer y mala salud para ambos sexos el tabaquismo, seguido del consumo de alcohol y el elevado IMC.

El 36,9% de todas las muertes por cáncer atribuibles a factores de riesgo a nivel global, tanto en hombres como en mujeres, estuvo causado por el cáncer de pulmón, de tráquea y de bronquios, relacionados todos ellos con el tabaquismo.

En los varones le siguieron, el cáncer de colon (13,3 %), de esófago (9,7 %) y de estómago (6,6%), mientras que en las mujeres fue el cáncer de cuello uterino (17, 9 %), de colon y recto (15,8 %) y el de mama (11 %).

Los investigadores encontraron algunas diferencias entre los AVAD de hombres y mujeres en dos de las categorías de factores riesgos principales: los ambientales y de comportamiento.

Al examinar los riesgos ambientales, los investigadores descubrieron que los AVAD por cáncer eran tres veces más elevados entre los varones (3,9%) que entre las mujeres (1,3%), lo que sugiere que los varones pueden ser más propensos que las mujeres a trabajar en lugares con mayor riesgo de exposición a agentes carcinógenos.

En cuanto a los riesgos de comportamiento observaron que, los hombres (33,2%) tenían casi cuatro veces más AVAD de cáncer atribuibles al tabaquismo que las mujeres (8,9%).

Y que nuevamente los varones (7,4%) tenían más del triple de AVAD de cáncer asociado al consumo de alcohol que las mujeres (2,3%).

Ambas situaciones pueden deberse a que los hombres son más propensos a fumar y beber que las mujeres.

Diferencias entre áreas geográficas

La investigación detectó que, durante 2019, el 25,4 % de todas las muertes por cáncer y el 26,5 % de todas las muertes por cáncer atribuibles a factores de riesgo se produjeron de un modo desproporcionado en países de alto índice sociodemográfico, a pesar de que éstos solo representan el 13,1 % de la población global.

Las cinco regiones con mayores tasas de mortalidad por cáncer debida a factores de riesgo fueron Europa Central (82,0 muertes por cada 100.000 habitantes), Asia Oriental (69,8/100.000), Norteamérica de ingresos altos (66,0/100.000), América Latina del Sur (64,2/100.000) y Europa Occidental (63,8).

Hay que tener en cuenta que los patrones de muertes por cáncer y mala salud debidos a riesgos ambientales y laborales, conductuales y metabólicos difieren en todo el mundo.Las relaciones sexuales sin protección constituyen el factor de riesgo principal de mala salud en los lugares con menor nivel sociodemográfico.