Con motivo del Día Internacional de la Tuberculosis, el Grupo de Tecnología de Imágenes Biomédicas de la Escuela de Técnica Superior de Ingenieros (ETSI) de Telecomunicación de la Universidad Politécnica de Madrid (CEI-UPM) ha presentado esta iniciativa que permitirá analizar por parte de jugadores de videojuegos imágenes de forma remota con fines médicos. 

Cada semana las personas juegan a videojuegos más de 3.000 millones de horas; un pequeño porcentaje de ese tiempo bastaría para diagnosticar todos los casos de tuberculosis del mundo, según los responsables de la iniciativa. 

Aprovechar ese potencial es precisamente el objetivo de TuberSpot, "un experimento que permitirá comprobar la viabilidad del telediagnóstico colectivo y establecer una comunidad de ciudadanos científicos capaces de ayudar a diagnosticar tuberculosis on line", explica el doctor Miguel Luengo-Oroz, investigador principal del proyecto. 

Los países más afectados por esta enfermedad contagiosa pero curable, causada por una bacteria que se trata con antibióticos y que casi siempre afecta a los pulmones son precisamente aquellos con menos recursos económicos y sin suficientes especialistas para estudiar todas las muestras de posibles víctimas.

El procedimiento clásico para el diagnóstico de la tuberculosis consiste en examinar con el microscopio muestras de esputo (fluidos expulsados al toser) con el objetivo de identificar las bacterias que causan la enfermedad.

La idea fundamental de TuberSpot es que, al igual que se desmostró con MalariaSpot, al combinar los resultados de varios voluntarios podemos obtener un recuento de gran precisión. El objetivo del juego es que el jugador identifique tantos bacilos como pueda en dos minuto.

La puntuación se genera comparando los bacilos detectados por el jugador con los identificados previamente por expertos. Si el juego funciona, en próximas versiones del juego introduciremos imágenes que todavía no han sido inspeccionadas por especialistas para poder ayudar a diagnosticar nuevos casos.

El proceso implica analizar en torno a un centenar de imágenes por parte del especialista, lo que le lleva hasta 20 minutos de tiempo. Con TuberSpot la tarea se comparte entre muchos jugadores que no requieren conocimientos previos médicos, a los que se les ofrecen imágenes reales de muestras en las tienen que buscar y "cazar" bacterias antes de que se les acabe el tiempo de juego.

"La puntuación del juego se genera comparando los bacilos detectados por el jugador con los previamente identificados por expertos", explica el programador del videojuego, Daniel Cuadrado. 

TuberSpot, la aplicación está ya disponible en Google Play y también para jugar en línea desde cualquier navegador, además próximamente se podrá descargar para dispositivos iPhone.