Su enfermedad es de origen genético y se debe a que su organismo sobreproduce interferón, una sustancia que ayuda al sistema inmunitario a combatir infecciones y otras enfermedades. Las interferonopatías son enfermedades muy debilitantes y progresivas que llegan a producir la pérdida de cartílago y la autoamputación de los dígitos.

Los tratamientos actuales han frenado el avance rápido de la enfermedad en Raúl, pero no la detienen y su organismo termina adaptándose a ellos y, por tanto, pierden su efectividad inicial.

Investigadores de la Universidad de Murcia y el IMIB-Arrixaca están trabajando para identificar la mutación patogénica que sufre Raúl y poder así encontrar un tratamiento más efectivo para el pequeño. Si quieres colaborar con este proyecto, puedes hacerlo aquí.