Si después de comer sientes el estómago muy pesado, prueba a tomar una infusión de manzanilla. Esto te ayudará a aliviar los efectos de la digestión. Además, se trata de una bebida perfecta para relajarnos y para calmar todo tipo de dolores.

Gracias a sus propiedades antiinflamatorias, antialérgicas y antibacterianas, la manzanilla, que también podemos encontrar en forma de crema o loción para la piel, es muy beneficiosa a la hora de ayudarnos a combatir resfriados e incluso como parte de las medidas para bajar la fiebre. Por otra parte, es un producto que puede ayudar a respirar mejor cuando llega la época de alergias.

Por último, si decidimos tomarla en forma de infusión, conseguiremos eliminar gran parte de nuestro estrés. Lo que nos permitirá dormir mejor y sentirnos más descansados.