El deporte, además de tener numerosos beneficios físicos como la regulación del peso corporal, la mejora del sistema cardiovascular que ayuda a prevenir la obseidad y la arteriosclerosis, ayuda a que los niños tengan más confianza en sí mismos, cooperen y tomen decisiones en grupo.

A continuación las diez mejores formas para que los padres puedan incluir el ejercicio físico en la vida diaria de los más pequeños de la casa:

1. Motivación. Lo mejor para que los niños practiquen ejercicio físico es que esten animados por los padres para que poco a poco el deporte vaya formando parte de sus vidas.

2. Juegos en grupo. No hay nada más divertido para ellos que jugar con sus amigos. Esto hará que tomen decisiones en grupo y que aumente la capacidad de socializarse con los demás.

3. Cualquier oportunidad es buena. Todo momento es bueno para realizar actividades físicas. Hay que aprovechar cualquier lugar para motivar a los niños a realizar deporte.

4. Ejercicio en familia. No hay nada mejor que el deporte en familia. Por ello una buena táctica es salir y hacer actividades con los niños como dar un paseo o salir con la bicicleta por sus lugares favoritos.

5. Regalos activos. Si hay que hacerles un regalo, lo mejor es optar siempre por algo que les haga moverse como una bicicleta y dejar de lado otros juguetes más sedentarios como los videojuegos.

6. El perro, su mejor amigo. La actividad de un perro es una buena manera de que los pequeños quieran hacer actividades con ellos como jugar o sacarlos a pasear.

7. Desplazarse a pie. Normalmente, siempre recurrimos al coche para desplazarnos a cualquier lugar, incluso a los más cercanos. Por ello, cuando el tiempo y la distancia lo permitan, es bueno ir de un lado a otro andando o en bicicleta y dejar aparcado el coche. 

8. Educación en casa. Lo esencial es que los niños entiendan que la base de una vida saludable es hacer ejercicio y llevar una dieta saludable. Para ello los padres en casa tienen que hacerles ver que el deporte puede ser divertido y al mismo tiempo bueno para ellos.

9. El ejercicio físico puede ser divertido. Para motivar a los niños, lo mejor es elegir actividades que les resulten divertidas para que así quieran volver a repetirlas.

10. Cuidado con los peligros. Es importante que ante todo jueguen en lugares seguros donde no puedan hacerse daño ya que esto podría generar miedo en ellos y por lo tanto un rechazo hacia la actividad que se estaba realizando.