Aunque el desayuno sea la comida más importante del día, cada vez hay más personas que se olvidan de desayunar, sobre todo los adolescentes y los niños.

Pero, los expertos insisten en la importancia que tiene desayunar, como explica William Cochran, de la 'Amerian Academy of Pedriatrics', la importancia del desayuno:"Por ser la primera comida, pone el cuerpo en marcha para el resto del día". Pero, además explica que alrededor de un 30% de los adolescentes la abandonan.

Los expertos de esta organización americana explican que muchos niños no les apetece desayunar porque se acuestan demasiado tarde, en la mayor parte de los casos por estar ocupados con los estudios y los deberes, y a la mañana siguiente les cuesta despertarse: el resultado es que finalmente se levantan con el tiempo justo para vestirse, lavarse los dientes y salir corriendo al colegio.

De este modo, la falta de desayuno se asocia también a no dormir lo suficiente: conforme los niños se hacen mayores, tienen tendencia a dormir más tarde y, cuando esto sucede, "la mayoría prefieren dormir 15 minutos más a levantarse para comer un plato de cereal", explican los expertos.

Por otro lado, hay más posibilidades de que saltarse el desayuno cause aumento de peso que de que lo prevenga: según explican estos expertos, los adolescentes que desayunan a diario tienen un índice de masa corporal más bajo que aquellos que nunca desayunan o que lo hacen ocasionalmente. 

Además, el desayuno tiene beneficios en el rendimiento escolar. Aquellos niños que desayunan tienen un mayor rencimiento en el cole, "les va mejor en la escuela y tienen mejor concentración y más energía", aseguran los expertos.

El desayuno es, también, el mejor momento para tomar calcio y vitamina D, que fortalecen los huesos, los cuales continúan desarrollándose hasta los 25 años y es muy importante cuidar bien. 

Los cereales del desayuno, la leche, el yogur, las barritas de cereales, fruta o incluso batidos son muy opciones para la primera comida del día, sobre todo para los más pequeños de la casa, ya que aportan los nutrientes necesarios.

Por lo tanto, no queda duda: hay que desayunar, aunque vayamos con prisas.