Ángeles Carbajal, profesora de Nutrición de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid explica que las legumbres juegan un papel fundamental para la prevención de muchas enfermedades crónicas y además, son alimentos sostenibles para el medio ambiente. De hecho, se trata de unos alimentos que dejan una menor huella ecológica.

Estos alimentos no deberían faltar en la dieta de ninguna persona, especialmente en la de los niños, pues son fuentes muy ricas en hierro, vitaminas, hidratos de absorción lenta, fibra y proteínas, sin incluir grasas saturadas, de las que tan malo es abusar. Contienen además cobre, calcio y ácido fólico.

La experta nos explica cuáles son sus ventajas: 

- Las legumbres son las semillas secas de plantas leguminosas y han formado parte de la alimentación de las personas, durante siglos, por su alto valor nutritivo. En la alimentación de los niños es un alimento imprescindible. 

-  Son una importante fuente de hierro, potasio, magnesio y otros minerales; ácido fólico y otras vitaminas B; aportan antioxidantes y otros bioactivos como fitoesteroles, isoflavonas o saponinas; tienen un bajo índice glucémico; y no contienen gluten, lo que las hace aptas para los celíacos.

- Son ricas en hidratos de carbono de absorción lenta que escasean en gran medida en la dieta actual. Los niños necesitan energía ya que consumen mucha durante el día.

-Tienen gran cantidad de proteínas de alta calidad especialmente cuando se consumen combinadas con otros alimentos.    

-Son una excelente fuente de fibra, que también falta en la dieta actual.

- Contienen poca grasa y poco sodio y no tienen colesterol.

-Suministran también otros componentes bioactivos antioxidantes importantes para la prevención de enfermedades.  

-Son alimentos que se conservan muy bien de manera que podemos tenerlos siempre en la despensa y recurrir a ellos en cualquier momento.