A María, la pequeña de la familia, lo que más le ha gustado es la visita a las vacas de la finca.

Natalia, la madre, se apuntó a El Estirón porque María tenía unos kilitos de más y no sabía como hacer que comiera de todo y que estuviera en su peso.

Miguel, el hombrecito de la familia, ha aprendido a comer bien en este tiempo y ha descubierto que el cerdo es comestible y, que tienen que procurar comer más pescado.

Toda la familia ha estado haciendo mucho ejercicio y han prometido que continuaran haciéndolo a partir de ahora. El ascensor lo sustituirán por las escaleras.