Por edades y género las mujeres y los jóvenes tienen un índice de infracciones menor que los hombres. Por ejemplo, en cuanto al exceso de velocidad el grupo de edad más denunciado por este motivo es el de los conductores de entre 45 y 59 años con un 32%. Por género, las mujeres son denunciadas por exceso de velocidad en un 17%, mientras los hombres lo son en un 32%.

Aunque la opinión mayoritaria (51%) es que la limitación de velocidad se establece por protección,4 de cada 10 conductores creen que tiene un objetivo recaudatorio, una opinión de mayor calado entre los hombres.  Mujeres y conductores de mayor edad consideran en mayor medida (54% y 57% respectivamente) que limitar la velocidad responde al propósito de reducir los accidentes.

Ocho de cada 10 conductores creen que las sanciones en accidentes graves que involucren víctimas deberían endurecerse. La presencia de víctimas se establece claramente como un motivo de endurecimiento, ya que en el caso de los accidentes sin víctimas encontramos un 34% que cree que las sanciones deben mantenerse igual de severas.