Un tomo de algo más de mil páginas, realizado por cuatro expertos del Instituto de Economía del Transporte de Noruega y que recoge, revisados, clasificados y resumidos, más de 2.000 estudios sobre seguridad vial elaborados desde 1960 hasta la actualidad.

Cada año alrededor de 1,3 millones de personas mueren en todo el mundo y otras 50 millones resultan heridas en accidentes de tráfico. Muchos de estos accidentes, que suponen un coste de entre un 1 y un 3 por ciento del producto interior bruto (PIB) de cada país, pueden evitarse mediante la implantación de medidas de seguridad vial efectivas, según los promotores del manual.

El manual expone los principales factores de riesgo de los usuarios de las vías de circulación y tiene en cuenta su contribución al número de fallecidos y lesionados.

De este modo, el estudio resalta el alto riesgo de choque que existe en las ciudades, donde se producen más lesionados que fallecidos debido principalmente a que la velocidad a la que se circula es menor que en otro tipo de vías, mientras que en las vías interurbanas se produce un menor número de colisiones pero un índice mayor de accidentes mortales.

Entre los factores de riesgo resaltan las infracciones a los límites de velocidad, el mal comportamiento de algunos vehículos en caso de choque, sobre todo entre los más antiguos, la no utilización del cinturón de seguridad y los obstáculos que se encuentran en los márgenes de las carreteras que están sin proteger por vallas o amortiguadores de impactos, entre otros.

Según los expertos, si se eliminaran todos los factores de riesgo incluidos en el análisis (unos 20) se reduciría el número de fallecidos en un 89 por ciento y el de lesionados en un 73 por ciento.

En cuanto a las medidas relativas al diseño de la vía y a su equipamiento en función de su relación beneficio-coste, los expertos aseguran que los carriles bici, los carriles de giro a la izquierda en los cruces, las rotondas en los cruces, las circunvalaciones y las intersecciones a diferente nivel son algunas cuyos beneficios superan ampliamente sus costes.

También se enumeran las medidas más efectivas y menos costosas que tienen que ver directamente con el diseño de los vehículos y los elementos pasivos de seguridad.
Y en este sentido los expertos colocan los cinturones de seguridad en primer lugar con una relación beneficio-coste de 31,7, lo que significa que por cada euro que se invierte en este elemento, que reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de accidente, se ahorran 31,7 euros en los gastos derivados de un siniestro.

Incluyen también en esa lista los parabrisas laminados, con una relación beneficio-coste de 30; el casco de motocicleta (17,2), el control inteligente de la velocidad (entre 3,7 y 16,7) y las luces de conducción diurna para automóviles (2,5), que todavía no son obligatorias en España, entre otras.