Este descenso también se observa en el porcentaje de heridos, que también ha bajado un 9 % respecto al mismo periodo de 2018, según los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT).
Sin embargo, en las vías que ya tenían el límite máximo de velocidad en 90 kilómetros por hora, el número de víctimas mortales no ha variado respecto al año anterior y, el de personas hospitalizadas por accidentes, se ha rebajado un 2%.
Esta es la primera medida que la Dirección General de Tráfico puso en marcha con Pere Navarro como director. Tiene como objetivo frenar la siniestralidad que provoca el exceso de velocidad en las carreteras secundarias, donde mueren siete de cada diez víctimas de tráfico.
La velocidad es la segunda causa de muerte en los accidentes de tráfico, detrás de las distracciones y por delante del consumo drogas y alcohol.
La velocidad fue la principal causa en 301 accidentes mortales en vías urbanas e interurbanas, el 22 % de los que se produjeron ese año. Pero, ese porcentaje se reduce dos puntos si solo se analizan las carreteras interurbanas, según el balance de la DGT sobre la siniestralidad vial en 2018.
El pasado año, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil realizó controles de velocidad a 13,6 millones de conductores y fueron denunciados 596.030.
Las infracciones por exceso de velocidad están multadas con tasas de entre 100 a 600 euros, la pérdida de entre dos y seis puntos en el carné de conducir y penas de prisión de tres a seis meses.
Son 1.500 los radares que están distribuidos por las carreteras españolas que controlan la velocidad de los vehículos, una cifra bastante inferior a la que tiene Francia (4.000) y a la de Reino Unido (8.000).
Por ello, Tráfico ha colocado desde este verano 78 radares más, de los cuales, veinte están operativos desde 1 de julio pasado con motivo de la operación verano y, los 58 restantes (15 de ellos de tramo) entran en servicio conforme se tienen las certificaciones correspondientes.
Los vehículos llevarán incorporado de forma obligatoria un limitador inteligente de velocidad a partir de 2022.
