En una respuesta parlamentaria al diputado Óscar Gamazo, portavoz del Partido Popular, durante la Comisión sobre Seguridad Vial, el Gobierno ha explicado que ya "se ha iniciado la tramitación" para la instalación de 45 nuevos radares de tramo, que se sumarían a los 1375 radares que hay en las carreteras españolas, de los cuales 750 son fijos, 543 móviles y 82 de tramo.

Los radares de tramo miden la velocidad media. Unas cámaras instaladas al principio del tramo reconocen y almacenan las matrículas de los vehículos que pasan, y, al final, otras cámaras de alta resolución leen las matrículas y comparan los datos con los almacenados al inicio para saber si el conductor ha respetado el límite de velocidad.

Con la incorporación de los nuevos 45 radares de tramo, en nuestro país habrá un total de 127 dispositivos. La DGT ha dicho que todavía no están presupuestados, de manera que es posible estos nuevos radares no entren en funcionamiento hasta finales de 2021.

Los radares han demostrado su efectividad para controlar el comportamiento de muchos conductores. El pasado mes de noviembre, Pere Navarro, director de la DGT, adelantó durante su comparecencia en la Comisión de Interior del Congreso que tenía previsto incorporar en 2021 75 radares nuevos, para vigilar y controlar la velocidad en las carreteras españolas, y 28 drones, 20 para vigilancia y 8 para formación.