La DGT ha explicado que, según los datos recabados este verano, el 26% de las personas que viajaban en turismos, y fallecieron en accidente de tráfico, no llevaban puesto el cinturón de seguridad en el momento del siniestro. El dato asciende al 30% entre los ocupantes de furgonetas.

Este porcentaje es similar al de los fallecidos sin dispositivo de retención durante todo el año pasado (171 de los 767), según la DGT, que ha precisado que pese a que el uso de dicho dispositivo de seguridad aumenta progresivamente (el número de sancionados pasó de 133.299 en 2012 a 127.900 en 2013), "todavía queda un pequeño reducto de usuarios reticentes a usarlo".

La Dirección General de Trafico que ha puesto en marcha una campaña, que se llevará a cabo durante esa semana, tiene el objetivo de intensificar los controles para comprobar que todos los ocupantes de los vehículos usan los cinturones de seguridad y los sistemas de retención infantil.

Desde esta campaña se insiste en la necesidad de utilizar los sistemas de retención infantil, subrayando que el año pasado cuatro de los veinte niños menores de doce años fallecidos en turismo y furgoneta viajaban sin los mismos. "Los sistemas de retención infantil son el mejor seguro de vida del niño, ya que 9 de cada 10 lesiones infantiles graves o mortales se habrían evitado si se hubieran utilizado sistemas de retención obligatorios. Además, un niño sin sujeción multiplica por 5 las posibilidades de sufrir lesiones", explica la DGT. Tras recordar cómo deben ir sujetos los menores, la DGT subraya que la mejor opción es el anclaje mediante el sistema Isofix, que sustituye al cinturón de seguridad y reduce la probabilidad de que la silla se coloque de forma incorrecta